miércoles, 28 de diciembre de 2016

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 596.-STREGA (ANDREW VACHSS)


Título: STREGA

Título original: STREGA

Autor: ANDREW VACHSS

Editorial: EDICIONES B

Trama: Una mujer vinculada a la Mafia intenta convencer a Burke, un exdelincuente (o quizás sin ex por delamte) que ocasionalmente trabaja como detective para que recupere una fotografía pornográfica que han sacado al hijo de una amiga, una fotografía de la que se sospecha que sólo se comercializa para coleccionistas, lo que hará que se sumerja en un mundo desconocido para él.

Personajes: Burke, expresidiario reconvertido en detective “sui géneris”, con una gran lealtad a quienes considera de los suyos y cierto sentido atípico de la ética, Max, amigo de Burke, sordomudo de origen mongol, con gran fuerza y habilidad para la lucha, Mamá, regente de un restaurante chino que aparenta ser algo más, siempre al tanto de lo que se cuece a su alrededor, Julio, viejo “capo” de la Mafia italiana de Nueva York, al que aparentemente le gusta más persuadir que forzar, El Topo, colaborador de Burke, un hombre callado y taciturno, con contactos entre los servicios secretos judíos, Inmaculada, refugiada vietnamita novia de Max, especializada profesionalmente en el tratamiento de niños que han sufrido abusos sexuales, Michelle, travesti amiga y colaboradora de Burke, El Profeta, colaborador de Burke que suele hacerse pasar por lisiado y al que no le gusta la violencia, Gina, más conocida por Strega, mujer cuyo sobrenombre significa “bruja” en italiano, enigmática clienta de Burke y sobrina de Julio, el mafioso.

Aspectos a Destacar: La inmersión en un submundo, el de la pornografía infantil y sus coleccionistas, a través de una novela negra de impecable factura y mostrándonos, fría y concisamente, cómo para quienes viven de ello y por ello es sólo un negocio o un placer del que no se sienten en modo alguno culpables.

La Frase: Todo el mundo se atiene a unas reglas para vivir. Las mías eran que no iba a morir; no iba a volver a prisión, y tampoco iba a ganarme la vida con un curro de ciudadano. Por ese orden.