domingo, 14 de julio de 2013

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 436.-EL SECUESTRO DE MISS BLANDISH (JAMES HADLEY CHASE)

Título: EL SECUESTRO DE MISS BLANDISH
Título original: NO ORCHIDS FOR MISS BLANDISH
Autor: JAMES HADLEY CHASE
Editorial: ANAGRAMA
Trama: Un pequeño grupo de delincuentes secuestra a la hija de un millonario para pedir rescate y apoderarse de sus joyas, pero la operación es interceptada por otro grupo más importantes que, tras desembarazarse de los anteriores, decide dirigir la operación. Las cosas se complicarán cuando el hijo de la jefa del "gang" se encapriche con la chica y no desea ni devolverla ni eliminarla.
Personajes: Riley, jefe del grupo de delincuentes pequeños, con más inteligencia y aplomo que sus compañeros, pero no suficiente, Eddie Schultz, mano derecha del grupo de gángsters más importante, eficaz ejecutor de las órdenes de su jefa, Slim Grison, psicópata al que le gusta matar, hijo de Ma Grison, mujer cruel y despiadada, jefa y cerebro de la banda que lleva du nombre, Johnny, pequeño delincuente, alcoholizado, que regenta una cabaña en la que se suelen esconder los perseguidos por la ley, Rocco, hombre que dominaba la protección y el juego en su ciudad, hasta que fue desplazado por la banda de "Ma Grison", Anna Borg, cantante y amante de Riley, mujer fuerte y decidida, capitán Brennan, jefe de la policía, hombre eficaz pero sin imaginación, Dave Fenner, detective contratado por el padre de la joven secuestrada, antiguo periodista, partidario de métodos expeditivos y al que no le importa no ajustarse estrictamente a la ley.
Aspectos a Destacar: Primera novela de James Hadley Chase, lo que le consagró como uno de los escritores más representativos del "hard boiled", basada en un personaje real, "Ma Baker"

La Frase: Sabía que su hijo no tendría valor para aquello. Sabía que lo único que podía hacer era matar. Sabía que tenía los sentimientos de un adolescente y que le faltaba coraje para coger por las buenas lo que su cuerpo pedía. Sabía también que, durante toda su vida, las mujeres le habían asustado, que las deseaba, pero que temía el ridículo de su torpe inexperiencia. Comprendía lo que su hijo sentía en aquellos momentos, con algo frágil, indefenso y bello en sus garras.