jueves, 28 de octubre de 2010

LA MUJER MUERTA (MANUEL RICO)

LA NOVELA: Al filo de cumplir los cincuenta años, el pintor Gonzalo Porta decide dar un cambio radical a su vida: abandona Madrid y se traslada a vivir a Cerbal, un pueblo de la Sierra Pobre. Allí pretende romper con el arte abstracto, al que debe su éxito, y volver a sus orígenes realistas. Entre los objetos que le acompañan desde la gran ciudad figura un cuadro en el que un hombre mira a una mujer, apenas reconocible, parada ante la entrada de un cine. Esa obra atrae la atención de una misteriosa pareja de artesanos que recorre en un viejo jeep la sierra madrileña. A partir de ese momento, desde la soledad rural de su nueva residencia, Porta se adentra en un mundo fantástico, donde la realidad de la España de mediados de los años ochenta se confunde con los fantasmas de la posguerra.
Manuel Rico vuelve a indagar en La mujer muerta, una de sus novelas más poderosas, en sus obsesiones literarias: la memoria histórica, el papel del arte en la modificación de la realidad, el compromiso político, la repercusión en la sociedad actual de los desmanes cometidos por los vencedores de la Guerra Civil… Todo ello ambientado en un territorio literario recurrente en otras obras del mismo autor, la Sierra Pobre de Madrid, en donde el tiempo parece haberse detenido y se empeña en no avanzar hasta que los protagonistas culminen el viaje interior que les reconcilie con el pasado y les haga enfrentarse a la verdad.

EL AUTOR: Manuel Rico (Madrid, 1952) es, además de narrador, poeta y crítico literario. Ha publicado las novelas Una mirada oblicua, Los días de Eisenhower, con la que obtuvo el Premio Andalucía de Novela 2002, Trenes en la niebla y Verano, galardonada con el Premio Ramón Gómez de la Serna 2009. Es también autor del libro viajero Por la sierra del agua y de las dos novelas cortas agrupadas en Espejo y tinta. La antología Monólogo del entreacto recoge una amplia selección de su obra poética, uno de cuyos libros, La densidad de los espejos, mereció en 1997 el Premio Juan Ramón Jiménez. Su último poemario se titula De viejas estaciones invernales. Colabora en diversas publicaciones (Revista de Libros, Lateral, Letra Internacional, Ínsula) y ejerce la crítica en el suplemento Babelia, del diario El País. Es autor del único ensayo publicado sobre el conjunto de la obra lírica de Manuel Vázquez Montalbán, Memoria, deseo y compasión, de la edición de su poesía completa y de varias ediciones críticas de poetas contemporáneos. Dirige la colección de poesía de Bartleby Editores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario